¿Atorados con la lecto-escritura?

La educación es un proceso bien complejo. Aprender a leer y escribir son dos tareas muy complejas.

La recomendación general es no presionar a esta actividad, pues es esencial en la vida. Por favor ¡no hagamos que la odien! 😀
Tip 1: ¿No le interesan la letras?

Usa una pizarra magnética para dejar un mensaje breve. “Hola, bonito día”, “Te dejé un chocolate en la mesa” y pídele que le diga a otra persona de la familia que ahí hay un mensaje para esa persona. No le digas qué dice en un principio. Esta actividad atraviesa varias etapas de la lecto escritura descritos en nuestro artículo:

Con este truco se despertará su curiosidad sobre ¿qué dicen los mensajes que se mandan a través de las letras? ¡Yo podría usarlas!

Tip 2: Para los artistas

Usaremos el concepto de la Flash Card Con la letra mayúscula, minúscula, dibujo y palabra

Dibujos para Colorear Letras Online

Usa una pizarra blanca sustituiremos algún elemento con nuestro trazo:
La niña o niño dibujará el avión tras dibujarle las letras, por ejemplo.
En caso de ser magnética tenemos mayor versatilidad: puedes colocar el imán de una imagen o la primera letra de esa palabra, o la mayúscula o minúscula.
Recomendamos que después de ver la letra A de Avión y hasta el final de dibujar un avión sea que escribamos la palabra de esa imagen.
Con este idea, puedes contornear la primera letra con algún material adecuado y escribir el resto.

¿Cómo apoyo a mi hijo para aprender a leer?

(respuesta a una pregunta al buzón)
A ver, comencemos por el inicio.
Nos parece maravilloso que tu peque se interese por aprender a escribir. Para nosotros los adultos es muy importante, pues le damos un significado especial de capacidad. A ello habría que agregar que en la escuela en México, se enseñan las letras desde los 4 años.
Es necesario declarar que no pasa nada si aprende a leer mucho después… tiene hasta los 7 años más o menos. Así que sin prisas, pues podemos volver este proceso un verdadero infierno por presionar a los chiquillos.
Declaración número dos: Imagina que cae una nave alienígena. Tras 4 o 5 años aprendes a hablar “alien”, ahora tu amigo espacial te enseña geroglíficos… más o menos así de complejo es el proceso de aprender a leer y escribir. Desde dicha perspectiva, nos parece, es más fácil poner en perspectiva el reto que enfrentan nuestros hijos al pasar por el proceso de la lecto-escritura.
Si me atrevo a hacer tal introducción es porque a pesar de que los papás nos decimos muy tolerantes, de manera inconsciente solemos presionar. No me parece tu caso y por el otro lado, es importante apoyarles cuando demuestran ese interés… ¡Menudo arte la paternidad!
Dicho lo cual, entremos en materia.
El proceso de lecto-escritura tiene varias etapas. Es importante que identifiquemos en qué etapa está nuestro peque para proveerle un mejor apoyo a lo largo de ese proceso.
Nombramos las siguientes etapas:

A) Identificación de la comunicación: Que el infante entienda que los humanos, además de hablar, nos comunicamos mediante imágenes (hoy en día los emoticones es un ejemplo de ello… ¡eso es muy divertido!) Adicionalmente nos puede ayudar a expresar nuestras emociones. Un material de apoyo para este ejemplo es el “Tapete caras y gestos” ).

Un desarrollo de este “logro” del infante podría ser una historia completa hecha con imágenes; para ello hay libros contados sólo con imágenes. O bien escenarios magnéticos, donde se pegan dibujos.

Libro de dos hojas con personajes de imán.


La cúspide de esta etapa sería asociar que una imagen, puede ser representada por una combinación de letras. A ello se le llama Flash Card (en el enlace un ejemplo). Con esta idea de la Flashcard, se ahce una gran cantidad de material: Memoramas, loterías, libros, etc (cada palabra te llevará un ejemplo del material).

B) Fonemas y gramemas. Fonema es cómo suena una letra. Gramema es la imagen que lo representa.

Una vez que sabemos que una idea se puede expresar en una imagen, la imagen en palabra, la palabra está formadas por varias letras, vendrán varias habilidades: Conocer las letras (para lo cual hay una sin fin de tipos de letras). Cada grafía (letra) corresponde a un fonema ¿Cómo suena la “F”? les decimos. “Suena FFFFFFFFF, como en ‘Foca’ “
Entonces estos materiales tipo flash cards de los que hablamos, los usamos para conocer los fonemas, apoyados por palabras que ya leemos en imágenes y con los que identificamos fácilmente las imágenes. DE ahí que haya muchos libros con una sola imagen y la palabra por ejemplo…

Acá podemos hacer agradable la lectura. Leamos un cuento con poquitas palabras, pero que cuenten una historia. Hagámoslo una y otra vez en varios momentos del día y dejemos que los peques nos cuenten el cuento alguna vez con sus propias palabras. Podemos ir con el libro señalando las palabras que vamos leyendo. DEtengámonos para recordar algún fonema (“mira, aquí dice fideo, esta es la f de “foca”, va con al misma de fideo). OJO: ¡NO dejemos de ser fluídos!, que estamos leyendo un cuento…

Al final de esta etapa queda normalmente un pendiente ¿cómo que hay mayúsculas y minúsculas? Eso es todo un tema que nos acompañará desde ahora. Lo mejor es usar material con ambos tipos de letra. Pero no nos preocupemos en exceso por ello. Para esta etapa se pueden usar rompecabezas de tres piezas.

Fíjate lo que decíamos en un principio: Para un niño de 4 años, distinguir entre mayúsculas y minúsculas puede ser casi imposible dada su madurez cerebral…

C) Juntar letras/Fonemas: A este tipo de lectura se le llama lectura de letras. Lo identificamos porque el niño lo va leyendo letra por letra “FFFFFFF-OOOOOO-KKKKK-OOOOO” ¡Foco!

A razón de repetir esto, se va a ir facilitando el proceso y dejamos de leer por letras para empezar a leer por medio de Sílabas. A esta etapa se llama lectura silábica y para ello ocupamos de las sílabas.

Para los procesos intermedios, podemos usar material que juntas las letras y vamos formando sílabas por medio de dejar juntas las letras, tales como el girógrafo, o las el dado múltiple.

Para esta etapa y distinguir mayúsculas de minúsculas se puede usar un silabario que destaque la mayúscula.

Entender esto como un proceso de Lecto-ESCRITURA

¿Cómo saber sen qué etapa va mi peque? Si no puede escribirlo, tal vez vaya leyendo muy rápido, es mejor que le dediquemos más a su capacidad motriz.
En términos de trazado: podemos ubicar tres “logros”:

Controlar la mano: Material insignia Laberintos

Agarrar el lápiz: Tomado en forma de triángulo. material insignia corrector de escritura

Soltar la muñeca: Ejercitar tal la mano que tengamos control de la muñeca. material insignia: Libros de colorear para no salirse de la raya

NO es la única forma de aprender. Hay tantas como estilos se puedan adoptar, sin embargo, al parecer esta es la más natural, tomando en cuenta que cada etapa puede tener saltos y regresiones. Especialmente, pensando en esta forma, se diseñó el “Método global de lectoescritura“, mismo que cuenta con un cd para capacitarse en el método, flash cards, láminas de abecedario, letras, sílabas, palabras aparte de las flashcards… en fin ¡Muy completo!

Una última recomendación: Si la niña o el niño nos ve leyendo… eso lo va a motivar más que cualquier material, escuela o libro para niños. ¿Nos interesa que lean? Que nos vean leer y que siempre sea un momento agradable.

LOS BENEFICIOS DE LOS JUEGOS DE MESA

Además de enseñar a los niños y niñas sobre el trabajo en equipo, la paciencia y a ser una buena ganadora o un buen perdedor, los juegos de mesa tienen beneficios añadidos que se ven reflejados en el desarrollo pleno de las habilidades de todos los jugadores, no sólo de los más pequeños.

Aquí les ofrecemos una lista, que no es exhaustiva, de las maravillas que representan los juegos de mesa para nuestra especie.

1. Los juegos de mesa ofrecen oportunidades para el aprendizaje temprano.

Incluso los juegos simples ayudan a los jugadores jóvenes a identificar colores, contar espacios y desarrollar la coordinación mano-ojo y la destreza al mover cartas y piezas sobre un tablero. Habilidades tales como la memoria, la capacidad de retención, el desarrollo de estrategias, también se desarrollan y mejoran.  Además, aprender a esperar su turno y seguir las reglas son lecciones muy importantes que les  sirven a los niños fuera de la seguridad del hogar.

2. Ayudan a la “ardilla cerebral” de los niños más grandes, los adolescentes, los adultos, los abuelos y abuelas….de todos!

Los juegos de mesa son una manera fácil de fomentar el desarrollo saludable del cerebro en niños mayores y adolescentes. Los juegos de mesa de estrategia ayudan al desarrollo y “mantenimiento” de los lóbulos frontales del cerebro, que son responsables de las habilidades de las funciones ejecutivas, que incluyen planificar, organizar y tomar buenas decisiones. Todos queremos que eso sea más fácil para nuestros hijos…¡¡¡ y también para nosotros!!!

3. Mejoran  las habilidades del lenguaje.

Los juegos de mesa pueden ser una forma astuta de ayudar a los niños en edad escolar a trabajar en las habilidades con las que tienen dificultades. Por ejemplo, los juegos en los que los jugadores tienen que recordar varios datos a la vez (quién hizo qué y dónde) podrían ayudar a un niño que tiene problemas para comprender la lectura, todo mientras se divierte.

4. Agudizan el enfoque de su hijo.

Los juegos de mesa, cuando se juegan sin interrupciones, pueden ayudar a alargar la capacidad de atención de un niño. Evidentemente, para cosechar este beneficio, todos los jugadores deben comprometerse a jugar el juego hasta el final. Si tu familia se sienta para jugar Scotlandyard, anima a todos a comprometerse a completar un juego sin que nadie  revise su celular,  le pida a Alexa que toque una canción, encienda el televisor para ver las noticias, entre a su tableta a revisar su correo o hable con Siri. Terminar un juego de mesa sin interrupciones ayudará a los niños (y adultos) a entender que es posible mantener la atención en una tarea  no digital durante períodos de tiempo prolongados. Esto es ideal para entrenar la capacidad de atención de los niños, en un mundo lleno de distracciones digitales.

5. Enseñan el valor del trabajo en equipo.

Los juegos de mesa a menudo ofrecen a los niños mensajes sobre la vida: su suerte puede cambiar en un instante, para bien o para mal. Pero además de enseñarles que nada está garantizado, en el caso de los juegos de azar, los juegos de mesa son una buena manera de alentar a los niños de diferentes edades a unirse y trabajar juntos, algo que deberán hacer durante toda la vida. Forme equipos de niños mayores que trabajen con sus hermanos menores, con sus tíos o la abuela. Los niños siempre se benefician de observar y entender cómo los demás resuelven sus problemas y desafíos. Y cómo puede él o ella contribuir a esa resolución.

6. Los juegos de mesa son una alternativa a los regaños,  peleas y dramas.

La próxima vez que te encuentres pasando por un mal momento con uno de tus hijos, considera jugar un juego de mesa juntos en lugar de regañarlo o mandarlo a su cuarto. Los juegos de mesa sirven trabajar en la relación madre/padre-hijo/hija. También se pueden usar para aumentar la tolerancia a la frustración en un niño. En otras palabras, tomar turnos y practicar la paciencia durante un juego, incluso cuando las cosas no salen bien, puede ayudar a los pequeños a practicar respuestas más respetuosas que hacer berrinche y gritar.

7. Los juegos de mesa alivian la ansiedad social.

Pueden ayudar a los niños ansiosos a aprender a navegar amistades más fácilmente. Debido a que tiene estructura, los juegos de mesa pueden proporcionar una manera más fácil de construir relaciones interpersonales con sus compañeros, ya que el niño sabe lo que se espera de él. Para los niños que tienen dificultades para entablar conversaciones con otros, se recomiendan juegos que promuevan oportunidades estructuradas para conversar, como juegos de adivinanzas o misterios.

8. Les enseñan a los niños cómo ser  buenos perdedores.

A veces, al jugar con un  niño que tiene poca tolerancia a la frustración y para el cual perder es realmente difícil, nos vemos tentados a permitirle romper las reglas para tratar de que el juego sea más tolerable y divertido para él. Pero lo más adecuado en estos casos será elegir un juego que sea corto y en el que las reglas sean pocas y claras, para poder seguirlas al pie de la letra para que los chicos tengan habilidades para afrontar las dificultades y promover con ello el desarrollo de  su resiliencia.

9. Los juegos de mesa son una excelente manera de desconectarse.

La magia de los juegos de mesa, en esta época digital, es que siguen siendo una forma sencilla de obtener tiempo de calidad con la familia. Si se acuerda previamente, la noche familiar de juegos de mesa puede ser un “tiempo sin pantalla”. Pueden convertirlo en una cita familiar semanal, y luego en una tradición valiosa, con pizza o palomitas, en la que tendrán tiempo de interactuar de formas positivas y forjar recuerdos de experiencias, que es lo único que permanece con nosotros a lo largo de nuestra vida. Esto es muy relevante en estos complicados tiempos, en los que las familias estamos en una lucha constante para encontrar un equilibrio sano entre las conexiones digitales y la vida real. Los juegos de mesa proporcionan una herramienta invaluable para establecer conexiones emocionales significativas entre los miembros de una familia y con los amigos. Convierte la noche de juegos de mesa en una tradición familiar semanal y observa cómo todos los miembros de tu familia  se divierten, mientras sus habilidades cognitivas y sociales se desarrollan y las conexiones emocionales aumentan en calidad y profundidad.